martes, 12 de agosto de 2014

Qué llevar dónde: destino Marbella

Porque no es lo mismo vaguear por carreteras ibicencas sin rumbo y parar en una de esas cafeterías naturistas a tomar tostadas de aguacate con tus alpargatas usadas que pasear por Puerto Banús, comprar en Chloé o salir a tomar un cocktail y acabar bailando junto a Julio Iglesias en Starlite. Marbella tiene su propio código, y ése es el del lujo. Piensa en los vestidos con aberturas imposibles de Versace, en el sexy subido de Tom Ford,  los brocados de Dolce & Gabbana, el glam de los setenta, sube el moreno de la piel y pierde el miedo a los brillos. Aquí, menos no es más.








Bañador con aberturas laterales de Mikoh, turbante de Missoni, gafas de sol de Fendi, pendientes de Ben Amun, pamela de Eugenia Kim, bikini de estampado étnico de Mara Hoffman, cuñas de Balenciaga, polvos de sol de YSL, vestido de lamé drapeado de Lanvin y autobronceador de James Read.



Brazalete dorado de Anne Demulemester, clutch de Charlotte Olympia, agua de colonia de Dolce & Gabbana, falda brocada dorada de Alexander Mcqueen, camiseta blanca básica de James Perse, falda drapeada de seda de Armani, anillo decó de Ios Selliani, pintalabios de YSL, top de cuero negro T by Alexander Wang, bañador Dolce  & Gabbana, collar dorado de Lanvin. 






Vestido corto de vuelo y aplicaciones de Valentino, sandalias de Gianvitto Rossi, clutch de YSL, vestido blanco drapeado de Versace, brazalete de piedras aguamarina de Ellen Conde, vestido largo estampado de flores de Roberto Cavalli, clutch de Alexander Mcqueen, pintauñas de Dior.

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